En horas de esta mañana se llevó a cabo en la sede de la Fundación para la Academia de la Gaita Ricardo Aguirre del Estado Zulia (Fundagraez) el primer encuentro de su nueva junta directiva con la prensa y comunidad gaitera, propiciando, a partir del recién asumido mandato del comandante Francisco Javier Arias Cárdenas, el enlace entre el poder popular y la cultura nata de la región.
Entre los puntos tratados, salió a flote la penosa deuda que se mantiene con los gaiteros que hicieron sonar sus gañotes durante el encendido de Bella Vista en la Feria de La Chinita este año, haciendo saber que se trata de una irresponsabilidad de la junta pasada y del que fue su presidente por ocho años, teniendo, como mala noticia en este encuentro, que el problema no podrá ser saldado hasta que la nueva junta adquiera la potestad ejecutiva total sobre la fundación.
La nueva junta, en concordancia con el brazo ejecutivo regional y el secretario de cultura, sociólogo Giovanny Villalobos, está conformada por Justo Montenegro, quien ocupa el puesto de presidente, mientras que Miguel Ordoñez, Leon Magno Montiel, Astolfo Romero, entre otras figuras del gentilicio marabino, forman parte de la nueva corte directiva de Fundagraez.
Leon Magno Montiel, con el micrófono en sus manos, aseguró que hay gran expectativa sobre la fundación: “la gaita es la voz de la identidad zuliana, y hay que mantenerla viva a la par de la danza, contradanza, décima y vals, que serán considerados por Fundagraez como prioridades a la hora de reestructurar y realizar un rescate de la autenticidad zuliana, que está en peligro de extinción”.
Por su parte, Leon afirmó que este se trata de un periodo de evaluación, de engranaje con una perspectiva similar a la de Umberto Eco, cuando se refería a la cultura como aquello que queda después de que todo se olvida, ya que nadie puede amar lo que no conoce, siendo Giovanny Villalobos el principal apoyo de la mano de Arias, con la unificación del gobierno bolivariano con el gobierno regional.
“Lo primero que hay que hacer es un esfuerzo de imaginación colectiva para formar un plan rector y evadir las islas, ya que Zulia ha perdido su huella dactilar, su identidad”, reiteró Villalobos, quien además priorizó la creación de un sistema de protección social para los hombres y mujeres que se han dedicado a la música, desde cantantes, trovadores, músicos, luthieres y hasta cultores, garantizando su futuro aun después de la jubilación, tal y como lo merecen.
Sobre el museo de la gaita, Giovanny dijo que las instalaciones de aquellos bingos expropiados podrían servir de alojo para centros culturales que asechan como proyectos porvenires para el periodo corriente.
Sin embargo, la biblioteca del estado, la Secretaría de Cultura, y el Conservatorio de Música se pondrán a la orden del Poder Popular.
“Cosas bonitas y positivas vienen”, concluyó Giovanny.
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